Y se que mañana es otro día, pero esta noche necesito perderme en mi locura, en mis desordenes y mi cansancio, esta noche necesito permiso para el tropiezo, llenar mi cara de lágrimas y olvidarme hasta del motivo por el cual empecé a llorar.
Y aunque sangren mis heridas, solo tengo que vendarlas, apretar fuerte los dientes, respirar hondo y seguir. porque sino la vida desgraciadamente se para.
El ilógico y estúpido pensamiento de cortarse un poco de pelo, para plantar cambios en tu vida. Si, yo lo pienso y lo hago. Es como si esas cosas de la vida, que quisieras que fueran distintas, se fueran en cada ruido de tijera. Pero no ¿sabes? no funciona, es un maldito mito ridículo. Y el día, puede transformarse en algo totalmente contrario o peor de lo que imaginas. Esta es la vida y los peluqueros no hacen milagros.
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