Heridas cicatrizando que nunca llegarán a sanarse. Tacones, fiestas y alcohol. Felicidad aparente: Sonrisa en la cara y lágrimas en el corazón. Mensajes baratos; conversaciones. Muchas palabras. Te quiero que dolían más que las mentiras.
Dudas. Caminar entre el amor y el odio. Sentimientos contrarios e incomprensibles. Largas historias. Quizás juntos o tal vez separados. Hemos formado parte de este juego y eso, quieras o no, a los dos nos dejó marcados.