Una delgada línea, casi imperceptible, y en ocasiones punzante y dolorosa, separa las decisiones por las que nos dejamos caer en la vida. Sin embargo; me asombra como algunas personas son capaces de vivir mucho tiempo, subidas en esa cuerda floja aguantando el equilibrio y sin tomar nunca partido por un lado u otro.
Personas que no se mojan. Ellas se consideran neutrales; no conflictivas, pero a esas yo las considero cobardes. Reconozco que yo soy un extremo opuesto, casi a punto radical, siempre digolo que pienso. Y a veces, creo que, debería aprender a ser más prudente, menos espontánea y ha guardarme mis opiniones...
Pero si eso ocurriese dejaría de ser yo.
“Quizás algunas de mis decisiones no son las más perfectas del mundo, pero las tomo Yo”. Y hoy decidí cruzar ese puente entre el dolor y la felicidad, quizás resbale en el camino pero lo voy a lograr.
Cada uno somos diferentes, afortunadamente, sólo es aceptarnos y hacerlo con el resto, siempre es importante el respeto y la tolerancia, es la base de un buen equilibrio.
ResponderEliminarBesos linda
Siempre me dijeron que la virtud está en el medio, en el centro: "virtus in medio". creo que la mayoría de las veces en medio está la MEDIOCRIDAD. Ese hilo, me parece más bien una gran superficie en la que la gente está muy cómoda. Pero SER es DECIDIR. Un abrazo: Joan Josep
ResponderEliminarPero mientras tomas decisiones y te equivocas ¡tú estás viva!
ResponderEliminarSi aciertas ¡que felicidad !, si te equivocas que aprendizaje .¡Adelante y sigue así!, que es "la única forma de vivir".
Besos.
no siempre tomamos las mejores desiciones uno tambien hace lo que puede, besitos
ResponderEliminarCada ser humano debe tomar el camino de sus propias decisiones, sea malo o bueno, no siempre es facil
ResponderEliminarBesotes
Tener la sabiduría necesaria para tomar decisiones es parte del crecimiento individual, creo que nadie puede decir no se haya equivocado alguna vez en tomar alguna desición.
ResponderEliminarBesos dulces para un feliz día.
Yo soy una de esas personas que se pasaron años en la cuerda floja, sin atreverse a decidir, o decidiendo y luego no actuando de acuerdo con esa decisión. Y sí, por cobardía. Por miedo al fracaso, al qué dirán o a mil cosas más. Pero tarde o temprano hay que mojarse, o si no se nos pasará la vida sin haber avanzado ni un paso...
ResponderEliminarHay que arriesgarse porque en ocasiones, una mala decisión es mejor que ninguna decisión.
Magnífica entrada, un besito!!
Perdóname si te mojo el blog jajajjajajjaj, soy un desastre amiga, aunque a veces por evitar más daño me he callado, por cariño, por respeto que se yo!! Siempre bello leerte y aprender a conocerte linda.
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