Que odio pelearme por una estupidez con gente que realmente me importa. Que odio cuando me dicen " Te extraño " y no hacen nada para verme.
Confieso que a mi también se me paró el corazón, que yo también tuve un nudo en la garganta cuando me enteré de algo y tuve que fingir que estaba todo bien.
Que cuando no entiendo lo que alguien me está diciendo, yo solo sonrió hasta que se calle. Confieso que yo también tuve un ataque de sinceridad y después pensé:¿Para qué carajo se lo dije?