Seguidores

Visitor

¡Después de muchos palos he aprendido que el miedo no se vence pensando, si no actuando.!

Con el tiempo aprendí, Frases, miedo, sonrisas, Después, Sueños Rotos, Arrepentimiento, Mi manera de ser, Así somos las mujeres, Motivación Diaria,

Sueño con cosas que nunca van a pasar, pero no me arrepiento de soñarlas. Pienso cosas que no se si deberían ni pensar siquiera, pero no me importa. Me rió sola en la calle, unos sonríen amistosamente al verme, otros, piensan que estoy loca. 

La verdad, me da igual. Soy sincera conmigo misma, nunca me engaño, porque engañarme no me va a llevar a ninguna parte.
Puedo cogerte de la mano y llevarte a donde tú quieras, y sabes que no te vas a arrepentir. 

Puedo contar el chiste más malo de la historia y hacerte reír, al darme cuenta de lo malo que es. Puedo ser y hacer muchas cosas. Puedo romper el hielo, o simplemente dejarlo derretir. Pero hay algo que nunca voy a hacer y es quedarme de brazos cruzados. Porque ¡Después de muchos palos he aprendido que el miedo no se vence pensando, sino actuando.!

Con el tiempo aprendí, Frases, miedo, sonrisas, Después, Sueños Rotos, Arrepentimiento, Mi manera de ser, Así somos las mujeres, Motivación Diaria,

La vida es tan solo un instante construido por instantes.

Instantes, Momentos de la vida, Tiempo, Aquí y ahora, Olvido, Frases para reflexionar, Reflexiones de la vida,

El tiempo transcurre inexorable y cada vez a mayor velocidad y no quiero malgastarlo desalentando por ello, ya que el tiempo seguirá transcurriendo inexorablemente y cada vez a mayor velocidad. Elijo, pues, abrir mis ojos y exprimir cada instante que la vida me regala.

No me permito quedarme sentada junto a la ventana viendo cada atardecer pensando que es otro menos y añorando los que ya pasaron, cuando la verdad es que, justamente, éste es el más importante de todos los vividos, ya que es el que realmente evidencia que estoy viva y que estoy aquí.

No quiero malgastar el tesoro de la vida, acumulando tiempo muerto en la biografía de mi alma cuando todavía sigo viva. ¡Claro que sé que el tiempo se agota! Y así empezó siendo desde el mismo día en que nací, así era cuando construía mis castillos en la playa, así cuando me enamoré tantas veces, así cuando trazaba tantos planes de futuro desde aquella atropellada juventud que brotaba por cada poro de mi piel. Pero entonces no me planteaba que el tiempo pasa rápido, sino que vivía como si todo fuera para siempre.

Y, sin embargo, el tiempo podría haberse esfumado detrás de cualquier risa, de cualquier pupitre, de cualquier castillo de arena junto al mar. Pero no era consciente de ello, tan solo, era consciente de cada momento que vivía. Me gusta mirar hacia atrás de vez en cuando, porque mi experiencia vital es mi mayor erario para seguir caminando y, de tanto en tanto, está bien refrescar la memoria y recolocar las cosas. Pero no quiero anclarme en el pasado que tanto me dio y tanto me enseñó, sino apoyarme en él para tomar impulso desde donde estoy.

Vivir el presente, sin tiempo, sin esperar mucho más del futuro que lo que nos aguarda en el instante siguiente. Evidentemente, no puedo evitar ir siempre un paso más allá; no puedo evitar hacer planes para futuros un tanto más lejanos, pero intento que esos proyectos jamás se conviertan en una venda alrededor de mis ojos que me impida ser consciente del momento presente.

No sé por cuantos instantes permaneceré aquí, pero pienso vivir cada uno de ellos. Y no quiero vivirlos como si fueran el último, eso jamás. Quiero vivir cada uno como si fuera el que es, el de ahora, el de este momento. Si pienso que cualquier tiempo pasado fue mejor, o paso mis días haciendo planes para un futuro que ni siquiera sé si llegará, me pierdo la magia de este tiempo en el que cada día amanezco a la vida nuevamente. Lo mejor está por llegar... tal vez. Aunque creo que lo mejor es, sencillamente, ser consciente de mi Ahora.

No quiero desperdiciar mi tiempo pensando en que se me acaba. La vida es tan solo un instante construido por instantes cotidianos. Y en ese momento fugaz, hasta caben los sueños. Por eso, labro cada uno de esos momentos con un sueño en la mirada, sabiendo que, de hacerse realidad, será también instante a instante, con cada parpadeo, y desde el presente. Eso aprendí. Y no quiero ser tan estúpida como para olvidarlo.

Y esperabas que yo estuviese disponible, pero ahora guardo todo mi amor para alguien que si me amará.

Noches Tristes


Al comienzo tenía miedo, estaba petrificada y seguía pensando que nunca podría vivir sin ti a mi lado, pero después pasé muchas noches pensando cómo me heriste y me hice fuerte. Y aprendí a continuar  y ahora has regresado del espacio exterior abrí la puerta y te encontré aquí con esa triste mirada en tu rostro.

 Hubiese cambiado ese estúpido cerrojo hubiese hecho que me dejaras mi llave. Si por un solo segundo hubiese sabido que volverías para molestarme. Vete ahora, vete, sal por la puerta date media vuelta ahora. Porque ya no eres bienvenido aquí.

 ¿Acaso no fuiste tú quien intentó herirme al decir adiós? Pensaste que me desmoronaría. Pensaste que caería y moriría yo sobreviviré y mientras sepa amar sé que seguiré viva. Tengo toda mi vida por vivir tengo todo mi amor para dar y sobreviviré.

 Necesité de toda la fuerza que tenía para no quebrarme. Seguí esforzándome para tratar de arreglar las piezas de mi roto corazón y pasé tantas, tantas noches solo sintiendo lástima por mi misma y solía llorar. 

Pero ahora camino con la frente en alto y cuando me ves, ves a alguien nuevo, ya no soy esa pequeña persona encadenada y aún enamorada de ti, te pareció bien simplemente aparecerte. Y esperabas que yo estuviese disponible, pero ahora guardo todo mi amor para alguien que si me amará.

Motivación