Fortaleza es lo que quiero, no intentaré iluminar un camino con pasos tan amargos, tan secos y llenos de oscuridad...tan largos. No creo poder mantener en pie el último trozo que queda en mi corazón que por muy destrozado que se encuentre late con más fuerza en aquel escondido rincón. Entero entregó cada pedazo, pero nunca espero nada de lo que recibió. ¿Qué recibió? nada.. traición escondida en miradas, crueldad acompañada de destrucción.
Pretendí ser menos vulnerable, intenté , creí y terminé siguiendo el ritmo de mis lágrimas e inquietando de soledad y silencio, con un día oscuro junto a un silencio de enorme profundidad, sombras rodeaban mi alma , la empujaban a detenerse, me congelaban las venas y me impedían el paso hacia el presente, este infierno que me obligaba a caminar un paso atrás calmó y por fin esta historia construida de melancolía acabó.
Acabó peor, trayendo recuerdos, momentos y lamentos con la inocencia de la espera de un final feliz, lo coronó la primera lágrima que el alma soltó por mi, ahora no quiero despertar, tu figura me persigue y mi corazón no late creyendo que nuevamente lo vas a matar, se esconde tras un carácter dominante, con respuestas negativas y arrogantes.
No te pone atención, ya no te mima como antes, te hipnotiza y hace pensar que tú ya no importas, que lo que tú hagas está fuera de su interés, pero el sabe que siempre latirá fuerte con solo volverlo a ver.