Hoy quiero ser esa amiga, sin ponerme condiciones. Que solo brinda su mano, para hacer que te levantes. Que siempre estará a tu lado, y mientras tú lo desees. Para paliar los momentos, en los que te sientas triste.
Hoy quiero ser esa amiga, que te escucha y te comprende. A la que el rostro que tengas, le parece indiferente. Que te regala su alma, para que pueda envolverte, y alejará tus desvelos, y tus miedos para siempre.
Hoy quiero ser esa amiga, que te cuide, que te mime. Que le devuelva a tu vida, todo aquello que perdiste. No tengo rostro ni nombre, sólo un corazón sensible. Que procurará que pronto, vuelvas de nuevo a reírte.